viernes, 14 de enero de 2011

A mitad de la campaña, el aceite sigue un 25% por debajo de los precios de producción.

JAÉN
Los olivareros de Jaén meten el turbo
El desarrollo óptimo del cultivo mejora un 15% el rendimiento de medios técnicos y humanos
14.01.11 - 01:48 - JORGE PASTOR jpastor@ideal.es | JAÉN.

Estamos en el ecuador de la campaña olivarera. Si se cumplen los pronósticos meteorológicos, que no auguran precipitaciones en la provincia hasta, al menos, el 22 de enero -el margen de error de los vaticinios se dispara a partir de las 72 horas-, el grueso de la recolección estará prácticamente finalizado. No es ninguna exageración. Pese a que el tiempo no fue un aliado en diciembre, con temporales incluidos, lo cierto es que esta campaña está cundiendo mucho más que la pasada, una de las más trabadas que se recuerdan debido a que el secano no existe. Me explico. En 2010 cayó tantísima agua sobre Jaén y este otoño ha sido tan húmedo que el grado de desarrollo de las plantaciones es óptimo. Sin antecedentes en el último lustro. Como consecuencia de ello, la dificultad para recoger el fruto se minimiza. La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) estima que el rendimiento de los medios técnicos y de los recursos humanos se ha incrementado un 15 por ciento respecto a la cosecha anterior. Todo va mucho más rápido, una circunstancia que tiene una lectura positiva y otra negativa. La positiva es que los agricultores gastan menos, aunque los precios del aceite siguen un 25 por ciento por debajo del umbral de la rentabilidad. Y la negativa es que se ofertarán menos contratos. Según la UPA, si un temporero echa en condiciones normales entre 40 y 45 días en el tajo, en esta ocasión se tendrán que conformar con menos de 40, una mala noticia si tenemos en cuenta que la aceituna es la única actividad económica con capacidad de generar trabajo, aunque sea de forma eventual.
El secretario general de UPA-Jaén, Agustín Rodríguez, comenta que, finalmente, la cifras de producción se asemejarán bastante a las proporcionadas por la Junta de Andalucía en el segundo aforo, en torno a las 535.000 toneladas, algo menos que año anterior. «Es cierto que ha llovido bastante, pero los ritmos son muy buenos», señala Rodríguez, quien agrega que, en contra de lo que se ha afirmado en determinados foros, la calidad no se está resintiendo en exceso. «Sí es cierto que los volúmenes de virgen extra no serán altos, similares a los del último ejercicio, pero el abastecimiento está garantizado».
Mientras tanto, los mercados, con el estímulo que supone la depreciación en fábrica (1,82 euros el kilogramo en esta última semana), siguen en plena ebullición. A tenor de las estadísticas que maneja la Agencia para el Aceite de Oliva, el consumo interior se sitúa en las 82.800 toneladas entre octubre y noviembre, lo que supone una leve mejoría respecto a la media de 82.400 del último cuatrienio. Donde sí se registra una evolución espectacular es en las exportaciones. En estos dos primeros meses computados se han alcanzado ya las 151.300 toneladas, lo que significa un 28 por ciento por encima del promedio de las últimas cuatro anualidades (118.200 toneladas). La gráfica sigue mostrando un perfil claramente ascendente y de seguir así estaremos nuevamente ante magnitudes récord.
Denuncia
La principal causa de esta eclosión es, por tanto, que los grandes distribuidores están comprando barato a las almazaras y cooperativas y están vendiendo barato en los supermercados, una situación sumamente perjudicial para los olivareros y muy beneficiosa para los consumidores. De hecho, los productores opinan que no se está jugando limpio. Precisamente, la UPA dio a conocer ayer el contenido de una denuncia que están elaborando sus servicios jurídicos, y que se presentará en breve ante la Junta de Andalucía, por una campaña de Carrefour en la que se ofertan diez litros de virgen extra a 17,55 euros -o sea, 1,75 el litro-. Entienden que la multinacional tarifa a pérdidas -las cotizaciones medias en origen a lo largo de 2010 se han mantenido en los 2 euros- , lo que contravendría, a juicio de la UPA, la Ley de Comercio Interior y la Ley de Competencia. «Tenemos bastante confianza en que esta vez lo podemos ganar porque hemos encontrado jurisprudencia que avala nuestra tesis», comentó este jueves el secretario de UPA, Agustín Rodríguez, quien también aludió a posibles incorrecciones en la etiqueta, ya que se habla de 'virgen extra frutado' cuando la clasificación oficial es sencillamente 'virgen extra'.

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