Poblado de San Julián: realismo mágico y arte urbano
Foto: Asociación Fuente Agria
Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo. Macondo era entonces una aldea de veinte casas de barro y cañabrava construidas a la orilla de un río de aguas diáfanas que se precipitaban por un lecho de piedras pulidas, blancas y enormes como huevos prehistóricos. El mundo era tan reciente, que muchas cosas carecían de nombre, y para mencionarlas había que señalarlas con el dedo...

Fabulaciones al margen, y gracias a que ha permanecido ajeno -como a casi todo- a la burbuja inmobiliaria, San Julián es un escenario único en la provincia. Con menos atractivo o parecido han conformado su oferta algunos establecimientos andaluces dedicados al turismo sostenible. Lo único que hace falta para entrar en ese circuito es I + I + I (Iniciativa, Imaginación, Infraestructuras). El arreglo de unas cuantas calles está bien, pero no es suficiente. Leer entero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
La libertad y el respeto son repelentes contra el fascismo. Ejercita este principio compartiendo tu opinión, hablando se entiende la gente.
El administrador de este blog no se responsabiliza de los comentarios a las entradas y no permitirá insultos ni injurias a personas o instituciones, borrando los comentarios no respetuosos.