miércoles, 22 de diciembre de 2010

El alcalde se queda a vigilar el río en vez de ir a luchar por los intereses de los afectados por las inundaciones.

Cortes viales por lluvias incesantes
MIÉRCOLES, 22 DE DICIEMBRE DE 2010 11:06 DIARIO JAEN PROVINCIA - NOTICIAS PROVINCIALES
Nuria López Priego/Jaén
La preocupación por un Guadalquivir que crece, alimentado por lluvias que no cesan, y que se tornarán tormentas mañana, y el miedo a riadas que siguen causando estragos, por mucho que se repitan, no desaparecen. Si bien las continuas precipitaciones de ayer no acabaron en desalojos ni inundaciones, el temor está instalado en la provincia.

La tierra encharcada de siempre.

La agenda del alcalde de Marmolejo, Cristóbal Relaño, señalaba, ayer, un nuevo viaje a Sevilla dentro de la comisión de trabajo que constituyeron, el pasado día 13, el Gobierno, la Junta y los 18 municipios andaluces —cuatro de ellos jiennenses— afectados por las inundaciones. Sin embargo, Relaño no llegó a coger el coche. ¿La causa? El Guadalquivir, que, de fuente de vida, en los últimos meses, se ha convertido en enemigo fatal. “Antes de irme —comentaba el alcalde marmolejeño—, he visto cómo viene el río. Por la altura que tiene, calculo que trae unos 600 metros cúbicos por segundo, pero llueve a mares”. Y, para evitar que lo llamaran, en cualquier momento, notificándole nuevas inundaciones, decidió quedarse en Marmolejo. 
El río se acerca a las naves.

Entonces, aún no daban las doce del mediodía. Las incidencias registradas por el Servicio de Emergencias 112 se limitaban a una docena —entre ellas, la formación de una balsa de barro en la Ronda de San Julián, en Andújar— y las carreteras cortadas por las lluvias estaban lejos de la veintena de hace poco más de una semana. Eran la J-9007, en la Estación Linares-Baeza, y las ya habituales JA-6000, en Mengíbar, y la JA-6075, en Villanueva de la Reina. La circulación permaneció interrumpida en ellas durante toda la jornada, según el listado de incidencias de la Dirección General de Tráfico. Aparte, hubo problemas puntuales en la carretera A-6177, en Andújar, por acumulación de tierra y barro y también en la A-311, en Lahiguera, y en la A-6076, en Espeluy, por agua y lodo. Esta vez, las incidencias fueron menores y se circunscribieron a carreteras secundarias. Y es que, si bien las lluvias no dieron tregua en todo el día y arreciaron por momentos, no se repitieron las temidas trombas que hubo durante el Puente de la Constitución y que obligaron a activar el nivel 1 de alerta por inundaciones.
Pero “la tierra está saturada de agua” —desde septiembre, ha llovido un 250% más que la media histórica, según el delegado de la Agencia Estatal de Meteorología, en Andalucía, Luis Fernando López Cotín— y ya ocurren “cosas extrañas”, apuntaba el alcalde de Marmolejo. En el acceso al municipio por el polígono industrial, “por primera vez, el barro de las tierras más altas cae a la carretera”. “Las máquinas —decía— han venido que limpiar tres veces esta mañana y se llena de barro continuamente. Y, en los sitios altos, ya se ven lagunas”.
En Lopera, 20 litros por metro cuadrado dejaron prácticamente incomunicado al municipio con la provincia de Córdoba. Sus únicas salidas a la autovía A-4 eran la carretera JV-2130, que une el municipio con la antigua N-IV, y el camino agrícola de Las Perillas. También sufrió la constancia de las lluvias la carretera que une Sotogordo (Mancha Real) con Puente del Obispo (Baeza), que amaneció cortada. La intervención de los operarios de la Junta la abrió al tráfico por la mañana, pero la circulación era difícil, reconocía la alcaldesa, Micaela Martínez.
En Villanueva de la Reina, la carretera de Cazalilla y la calle Azorín volvieron a enlodarse durante varias horas ante la desesperación vecinal. En la pedanía torreña de Campillo del Río, algunas calles se convirtieron en ríos de lodo y la carretera que une Vados de Torralba con la pedanía quedó intransitable, informa Europa Press, ya que el equipo de Gobierno local rechazó hacer declaraciones.
En definitiva, las incidencias fueron escasas, pero la preocupación es latente. El agua embalsada en los pantanos supera el 90%; según la Agencia Estatal de Meteorología, hoy tampoco dejará de llover y, mañana, se registrarán tormentas, y la Agencia Andaluza del Agua ya ha alertado de la necesidad de una mayor vigilancia en las zonas bajas de Andújar ante los crecientes niveles del Guadalquivir, con un caudal, ayer, a las ocho y media de la tarde, de 572,86 metros cúbicos por segundo, en Marmolejo, y 196,11 metros, en el municipio iliturgitano. Informan J. L. Pantoja, J. C. León y José Expósito.

1 comentario:

  1. Es decir, que en vez de ir a Sevilla a "luchar" por los intereses de los agricultores, vecinos, ect.. de las inundaciones, coge y se queda porque no se fia del rio??? Este hombre es una contante falta de respeto, y un egocentrico que todo lo quiere controlar, ¿ Qué pasa que no hay nadie más que sepa gestionar nada? Lo dicho, se rie de quien quiere. Algo le habrá salio más importante que esa reunión...en el cual le saque mas intereses...

    ResponderEliminar

La libertad y el respeto son repelentes contra el fascismo. Ejercita este principio compartiendo tu opinión, hablando se entiende la gente.
El administrador de este blog no se responsabiliza de los comentarios a las entradas y no permitirá insultos ni injurias a personas o instituciones, borrando los comentarios no respetuosos.