Las máquinas del Ayuntamiento despejaron el camino de Villalba por las Torrecillas. |
Quedan toneladas de tierra que seguro que se irán retirando poco a poco. |
Pero las rehalas están por fin comunicadas y a salvo. |
Sin embargo más adelante la visión es dantesca. |
El cuento de nunca acabar, la condena perpetua al barro y la inundación. |
Los destrozos de un año se suman a los del anterior y minan el espíritu de los campesinos. |
Y lo peor es que fuera de la protección del bunker de motas de Andújar, cuando el río suba por desembalses, la inundación está garantizada. |
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