La ley del olivar "tiene que garantizar la rentabilidad del sector como objetivo central",

Valderas espera que la Ley del Olivar se base en la economía social y esté muy participada por Asaja, COAG y UPA
SEVILLA, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -

El coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, ha expresado su confianza en que la futura Ley del Olivar se base en la economía social y para ello ha solicitado que esté muy participada por varias organizaciones agrarias como la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), así como por la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA).

En rueda de prensa, Valderas ha destacado que esta ley, que tiene como objetivo mejorar la eficiencia productiva del sector del olivar y la competitividad del aceite de oliva y de la aceituna de mesa, debe ser "un instrumento de servicio al sector agroalimentario andaluz y hacer que el olivar cumpla un papel social en este contexto".
Del mismo modo, el líder de IULV-CA ha señalado que la ley "tiene que garantizar la rentabilidad del sector como objetivo central", teniendo en cuenta su dimensión en la Comunidad y los "miles y miles de jornales de los que viven muchos de los andaluces".
De esta forma, ha aseverado que "hace falta modular las ayudas y orientar el cumplimiento de las ayudas", por lo que ha hecho alusión a una serie de propuestas que, a su juicio, deben estar contempladas en la Ley del Olivar. Así, Valderas ha defendido que se debe "recuperar el mecanismo de intervención como garantía en el precio del aceite que permita la rentabilidad y la sostenibilidad del olivar".
Asimismo, ha apostado por la "prohibición taxativa de mezclas, mantenimiento las ayudas a la producción y sobre todo al olivar más débil para hacer compatible la continuidad del sector" y ha reiterado, de manera contundente, que la ley debe "impulsar la concentración de la oferta, así como defender la economía social por todo lo que representa el olivar" en cuanto a su repercusión a nivel andaluz.
Por último, Valderas ha indicado que se trata de "mejorar el medio ambiente, la producción y la calidad en el olivar" y, además, favorecer el tejido social y la capacidad de respuesta en el desarrollo de las zonas olivareras garantizando "la seguridad alimentaria e impulsando la economía social", reforzándose de esta manera el sector cooperativo del olivar, participado en gran medida por pequeños y medianos empresarios.