El Psoe de Marmolejo no se entera y no cambia, dos años de mítines por delante con todos los gastos pagados.

No nos engañemos, estos no representan a nadie.

La realidad, en Marmolejo, supera ampliamente la ficción y lo que está pasando no tiene desperdicio, ni  justificación posible. 

El Psoe, después de haber abandonado cualquier intención de preocuparse de la ruina en la que han dejado a los vecinos, al Ayuntamiento y a Marmolejo en general, se ha instalado en una campaña electoral permanente para intentar borrar lo infame de su conducta. Es un insulto y una vergüenza al mismo tiempo el pavonearse ante las dificultades de los vecinos intentando culpar a IU de sus propias miserias y jactándose de tener soluciones mágicas a todos los problemas, mientras piden el voto para dentro de dos años... y dos años son demasiado tiempo para estar quitados de enmedio, viendo los toros desde la barrera, vestidos de bonito y embaucando a los paisanos.

Por eso, no representan a nadie más que a sus propios intereses partidistas, porque no están los tiempos para andar por los cerros de Úbeda ajenos al chaparrón que está cayendo y poniendo zancadillas, porque no ofrecen soluciones, porque su única misión durante los dos próximos años es acosar  y procurar derribar el Gobierno Municipal haciendo el máximo daño posible al pueblo, cuando podrían gobernar simplemente con la ayuda de sus nuevos socios del PP, a los que les une el odio visceral al partido en el gobierno y la despreocupación más absoluta por los problemas de los marmolejeños, porque el pueblo se la trae al pairo, porque es un disparate y una inconsciencia andar ignorando la realidad y dedicarse a contar cuentos chinos por las esquinas.

No representan a nadie, ni a sus votantes, ni a sus vecinos, ni a los que lo están pasando mal por la crisis, ni a los parados, ni a los dependientes o jubilados, no representan al sentido común ni a la dignidad de los trabajadores, ni al presente de Marmolejo, solo al pasado más bochornoso y patético y, si consiguen engañar o asustar los vecinos, representarán al futuro más negro posible, el que propician los que van estrictamente a lo suyo, los que pasan del pueblo, a los que les da igual por donde venga la ruina o si las deudas se amontonan en los cajones, lo importante es tener barra libre, cuenta abierta y al pueblo comiendo en sus manos por las buenas o las malas. Si representan a alguien es a la esencia de la corrupción, a los amos de los cortijos, a los caciques y explotadores, a los manos rotas, a los crápulas y los que se saltan las leyes a la torera, a los que hacen listas negras, a los que creen que la política es el arte de pegarse la vida padre a costa del pueblo y sobre todo representan dignamente a todos los que piensan que los dineros públicos no son de nadie y su estrategia es el despilfarro más abusivo, y que "el que venga detrás que arrée".

En este contexto, pretender que los vecinos se traguen sus torpes milongas es muy difícil, pero lo es más aún que se sientan representados por ellos. Es de genero absurdo que los mismos que se han enriquecido y despilfarrado a costa de todos y cuyas facturas estamos pagando entre todos, vayan ahora a golpe de mitin aliñado de triunfalismo barato a convencer a nadie de que ellos son inmaculados querubines y doctos gobernantes, dechados de virtudes y vecinos ejemplares, como dijo el otro: TEQUIES IR YA....

El PP es otra versión de lo mismo, él solo se ha descalificado, ha cogido los bártulos y se ha marchado del gobierno municipal cuando ha visto que los problemas son legión y las armas muy pocas. Una deserción en toda regla, una autoexclusión de la representatividad, un abandono de sus responsabilidades, un salto de la barrera cuando se ha visto que el toro era demasiado para ellos, un reconocimiento implícito de su incompetencia y su desprecio por los vecinos, a los que se pretende demostrar que fuera del gobierno se gobierna mejor que dentro. Otra milonga, otro insulto a la inteligencia de los marmolejeños para enmascarar la profunda cobardía y el canguelo en el frente de batalla, en la trinchera donde se pelea día a día junto a los vecinos y por el futuro de las familias de Marmolejo. No hay disculpa posible ni perdón imaginable cuando se abandona al pueblo a sus suerte y aún peor, cuando se intriga contra ese pueblo, cuando se utiliza como arma arrojadiza o moneda de cambio para conseguir objetivos políticos, como si se tratara de un juego en el que las personas son fichas y la banca siempre gana. ¿A quién representa el PP?, a los que huyen, a los que no se comprometen, a los que, como los socialistas, creen que desde la barrera se gobierna mejor y, por lo menos, el desgaste es menor. Menudo par de socios, menuda vergüenza, menuda cara dura.

 Hoy, cuando la situación es crítica para muchas familias, cuando los vecinos no pueden sentarse esperar con los brazos cruzados a que lleguen tiempos mejores, como está haciendo este PPsoe de las narices,  los únicos que están dando la cara y peleando hombro con hombro con los vecinos en la búsqueda de soluciones a los problemas heredados de los socialistas, es IU, el PP pudo y no quiso, así que que no intente tapar su vergüenza apretando las clavijas al Equipo de Gobierno actual que al menos sí está con los vecinos, que está dando la cara, que no se arredra, que no huye, que mantiene contra viento y marea y a pesar de los ataques del PPsoe los servicios esenciales del municipio, que atiende a todo el mundo, que no politiza la gestión, que tienen el pundonor necesario para estar en su sitio, que es del lado del Pueblo, y sobre todo que no se vende ni comercia con la miseria de los vecinos por un puñado de votos.

La realidad es que por desgracia los partidos mayoritarios de Marmolejo no representan a la ciudadanía, solo se representan así mismos, sus intereses políticos, su ansia de poder, su intransigencia y su ceguera ante los problemas de los vecinos.  Estos van a inventar el gobierno a distancia, desde la oposición, de rositas, estos gobernarán cualquier día por poderes, en rebeldía, en ausencia de responsabilidad, sin mancharse las manos, con asepsia social, un día gobernarán sin pueblo, sin ese pueblo al que tanta alergia le tienen y que tanto dicen representar mientras se pegan unas vacaciones de dos años entre fiestas y mítines. No nos engañemos, estos no representan a nadie.