QUE NO NOS QUIERAN TOMAR EL PELO.
Clama al cielo, y atruena el sentido de la decencia, cuando se insulta la inteligencia de todo un pueblo. Vive dios que se están cruzando todas las líneas habidas y por haber, basándose en la decisión de que el vulgo, los paisanos, los vecinos somos una suerte de semovientes domesticados e idiotizados por un sistema creado ad hoc. Esa decisión solo la puede haber tomado una élite económica que domina la más palpable variante de la estupidez suprema; la que conforman nuestros gobernantes, cretinos profesionales que, por cierto, están excelentemente pagados por nosotros.
Nos lanzan panfletos, en mitad de una pandemia, para
redefinir y explicarnos, al más puro estilo de “barrio sésamo” lo que significa
“mucho y poco”; para que donde hay desastre, entendamos que vemos logros y
donde hay motivo de preocupación, solo veamos motivos de celebración… No se
puede jugar con los números de una epidemia en sentido manipulador, electoralista
y partidista, por la misma razón que no se puede jugar con la salud y las vidas
de las personas por los mismos motivos. Los números no son un arma arrojadiza
en manos del oportunista de turno, no son un discurso barato ante una audiencia
zafia, no son una cuenta de cristal brillante y enigmática por la que estemos
dispuestos a cambiar lo que nos pidan. Desde la antigüedad, desde Tales, Pitágoras, Euclides o Arquímedes,
los números representan el reflejo más fiable de la realidad que nos rodea. Solo los números pudieron cuestionar los mitos y a los dioses.
Lo que no tienen perdón de dios es que una horda de
medioanalfabetos con ínfulas se dediquen a "contar/manipular" la realidad, cada cual al
estilo que más les conviene, intentando, para colmo de males que el común de los
mortales tengamos que asentir, comulgar con ruedas de molino, y acatar las burradas que nos quieran
endiñar como verdades indiscutibles y dogmas sacrosantos, contra los que no hay discusión posible sopena de ser acusados de extremistas o algo peor, antisistema.
En esta página la Junta de Andalucía, mediante la Consejería de Salud y Familias, da un informe diario y actualizado, por provincias, distrito sanitario y municipio, en este caso de Jaén, de casos del COVID19 confirmados, curados y fallecidos.
El caso es sencillo, apliquen matemáticas básicas y realicen sencillos cálculos sobre los datos que se ofrecen para llegar a las conclusiones que nos revelen la realidad de la incidencia de la pandemia. Con esto conseguiremos que no nos cuenten milongas, que no se nos trate como analfabetos crédulos y manipulables y que se nos empiece, de una vez por todas a respetar como ciudadanos, que ya va siendo hora. Si además empezamos a tener memoria, mejor que mejor. No en vano llevamos un tiempo dejando copia casi diaria de los datos en Pregonao, para que conste y se puede recurrir a ellos. La memoria de los que nos cuentan la película que a ellos les conviene suele ser selectiva, frágil, errónea y capciosa.
Otra cuestión es que los datos que proporciona la Junta sean auténticos, o fiables, o aproximados, o con cierto valor referente o representativo y no sesgado. Hace unos días se tocó este tema y, la verdad, la conclusión a la que se pudo llegar es que los datos reales y la información de los mismos es una moneda de cambio muy valiosa, extremadamente sensible a manipulación y raramente utilizada sin maquillajes, es un activo muy valioso en manos de los políticos, administraciones de toda índole y las empresas que conforman lo que se viene a llamar “mercados”, incluidos los diferentes, abundantes y omnipresentes medios de comunicación.
Hay que tener en cuenta que dependiendo del tratamiento que reciba la información y la forma en la que llegue a nuestras entendederas y afecte a nuestras vidas, así bailarán economías, patrimonios, empresas, elecciones y fortunas…, y pensándolo bien, es la caraba, porque la mayoría de la información relevante es objeto de la misma controversia e interés detallado. No en vano millones de criaturas, suponen millones de votos, millones de clientes y millones contribuyentes. Y con las cosas de comer no se juega.
Llegados a este punto, no exentos de cierto esfuerzo sintetizador, que no simplista, y sin haber caído en la hazaña de Alvar Fañez, de habernos ido por los cerros de Úbeda, hay que volver a las cuestiones que nos ponen los pies en el suelo, al tiempo que ilustran y refuerzan la necesidad de perentoria de clamar contra tanta necedad y burdo despropósito.
1- Se nos asegura que “La tasa de incidencia del
COVID, en Marmolejo, es un tercio de la media en Jaén”,Y es verdad, solo si miramos donde quieren para que saquemos las conclusiones erroneas que a ellos les convienen. Vergüenza de panfletos que, por desgracia solo sirven para la escatológica faena de limpiar la imagen de politiquillos de cuarta e impresentables y ..., poco más.
Hagan memoria y números, señores.
Desde finales de Agosto no bajamos de 500 casos activos por 100.000 habitantes.
Dicen que hay pocos contagios, la tasa PDJA a 14días en Marmolejo es convenientemente baja, 58.7, y la de Jaén es de 402, pero no nos engañemos, los casos activos son preocupantemente altos, casi 600 por cada 100.000 habitantes, cuando la media de Jaén es 713.3; luego no andamos ni tan lejos, ni tan a salvo, ni tenemos porqué sacar tanto pecho, ni tienen nuestros políticos que echarse tantas flores. Hay motivo serio de preocupación, pero de eso no dicen nada.
Señores, con las cifras que nos dan, esto es lo que tenemos. Y la impresión es que han "aplanado" las curvas por pura ingeniería estadística o, como se decía antes, por ejercicio y obra de prácticas de contabilidad creativa. Lo sangrante es que hay una parte de contagios que permanecen positivos y que parecen estar permanentemente en el limbo de los justos, a su aire y sin darsele la requerida importancia; más bien se le quita yerro..., bien, Manolo, bien, lo estás clavando.
Lo que es un escándalo es que encima, con la que está cayendo, en lugar de controlar el patio y mirar por la salud de los vecinos, nuestro Alcaldísisisimo Lozano, dedique su interés, tiempo y esfuerzos en practicar políticas corraleras de altos vuelos, de palo de gallinero, y se concentre en juntar a sus alcaldes compis de partido, con Susana Díaz a la cabeza, para despotricar de la Junta, justificar su incompetencia y esconder la mano depués de lapidar a los vecinos.
Lo veo y no me lo creo, aprovechando que en Madrid la comunidad le declara la guerra al Gobierno de Sanchez, aquí comienzan ya a preparar las hostilidades y emprenderlas contra el PP de la Junta. La vergüenza patria llevada a la enésima potencia. Guerra, reproches, insultos, mercadeo, mentiras, puñaladas traperas de todos contra todos y la gente de apie enfermando y muriendo, desesperados y solos, pasando vergüenza ajena de sus políticos. Los nadies, los vecinos, los niños, ancianos y "descamisados", en medio, rojos de vergüenza y ciegos de indignación.
En esta España nuestra ahora si que va a ser verdad el dicho " ENTRE TODOS LO MATARON Y ÉL SOLO SE MURIÓ". Y en medio de todo esto, nuestro Manolo Lozano, el bién pagao, la falsa moneda, la vergüenza de Marmolejo, y por ende, el orgullo del Psoe.
No hay palabras, para definir tanto dolor, tanta vergüenza, tanta decepción y tanto hijo de su madre suelto; o al menos, a mi, las que se me ocurren, no me atrevo a escribirlas, porque sonarían como a puñetazo en la mesa, y a los palos en las costillas que les hacen falta a muchos, como diría mi abuelo.
Salud y suerte.
Según Susana y Lozano, los socialistas tienen todas las soluciones y si gobernaran ellos en la Junta la pandemia sería una cosa menor, que los alcaldes socialistas son tratados como unos mindundis que no se enteran de nada y por lo tanto no son responsables a nada.
ResponderEliminarDe verdad que es un insulto a la inteligencia y a la memoria que lleven tantos años echando la culpa de todo a los demás y jurando que ellos no son responsables a nada de nada.
No puede ser que sea esto lo que merezcamos, aunque sea esto lo que consentimos. Da igual que vivamos en el siglo xxi, si nos educan y tratan como si vivieramos en la edad media.
la solucion del covid no es la inmunidad del rebaño, sino el aborregamiento del rebaño. y los pastores saldrán reforzados, impunes, ricos y chuleandonos. así somos, y no nos queda nada que pasar!!!
EliminarUnos cuantos tienen la mayor parte de la riqueza, un ejercito de lacayos vigilan que nada cambie, la mayoría vive al limite de la precariedad y las colas de mendigos piden a la puerta de la iglesia mientras hay una beneficiencia oficial que colabora para evitar rebeliones en masa. Obviamente, estamos en la Edad Media.
EliminarRespecto al artículo solo decir una cosa, "tortura a las cifras y ellas te dirán lo que quieras", eso no es ni más ni menos que lo que están haciendo tanto los gobiernos autonómicos como el resto de diversos gobernantes.
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