Para salir del Infierno con el que nos castiga el Psoe...

 ...hay que superar la plaga de corrupción e incompetencia que asola el Ayuntamiento de Marmolejo.

La demagogia oficial del régimen local pseudosocialista, en sus ya 26 años de vida, afirma rotundamente que "la capacidad de endeudamiento de un ayuntamiento es ilimitada", y en el caso de Marmolejo, infinita, incalculable e imparable; va paralela a la ambición de los incompetentes que nos gobiernan, pero sobre todo, a su impericia e ignorancia a la hora de gestionar y la desviación perversa e inaceptable de sus objetivos a la cabeza de la política marmolejeña, que no son otros que el máximo aprovechamiento personal de los privilegios del cargo, el ejercicio del poder de forma abusiva, negligente y arbitraria y el hundimiento social, económico, cultural, deportivo, político, asociativo, organizativo y funcional del pueblo de Marmolejo.

En otras palabras, que las prioridades de esta catelfa de irresponsables son, a saber, no doblar la raspa, llenar la panza suya y de sus secuaces, agarrarse al sillón y tener a Marmolejo, a los vecinos, siempre en precario, en un estado tan lamentable, que a ninguno se le ocurra pararse a cuestionarlos, sino más bien todo lo contrario, que huyendo de la ruina, sean presas fáciles, víctimas asustadizas y tan temeros que, antes de "señalarse", terminan siendo muy leales palmeros.

Desde luego no es para aplaudir la última hazaña de esta mayoría disoluta en cuanto a la moral, ya que el viernes pasado se entretuvieron en aprobarse entre ellos mismos, pedir otros casi 300.000 euros a quién se los preste, para pagar las consecuencias de su nefasta gestión; las deudas galopantes que se amontonan producto de juicios perdidos por haber querido estafar a la ciudadanía.

Lo hicieron mal en su momento, le sacaron los cuartos a la gente vendiéndoles humo, promesas y ruina, y ahora, cuando todavía millones y millones de euros no se sabe donde andan, o como se emplearon, o lo que es lo mismo, que se manejaron sin ningún control, y hemos de volver a pagarlos; ahora tenemos que apoquinar entre todos los vecinos, por el momento, otros casi 50 millones de pesetas por haber gobernado como auténticos gorrones, tan irresponsable como inexplicablemente.

Es tétrico, tremendo, agónico y desesperanzador ver como, en Marmolejo, día a día, nos acostumbramos, asumimos y asimilamos un  lúgubre espectáculo: el infierno, al que nos ha conducido este nuestro Caronte particular llamado Lozano, y el hundimiento en el averno al que nos están condenando.

Tenemos un primer círculo, un Limbo de desprecio para los que no leen y no tienen el carnet del partido, a estos vecinos sin el sello del psoe se les priva de su derecho básico a la igualdad de oportunidades, se les ningunea y pierden opciones de trabajo y de futuro. Pero el verdadero infierno comienza en el segundo círculo, en el que se ceban con los que pretenden asociarse al margen del control de este grupo de pintas con delirios de grandeza, que deshonran la memoria del Psoe; AAVV, y cualquier otro tipo de asociación, si no se puede manipular, es perseguida con saña desde el Ayuntamiento. En el tercer círculo los cerberos de este infierno, pelotas con ínfulas y mamarrachos, hacen de las suyas abusando del poder y haciendo que se arrastren por el fango las aspiraciones de cualquiera que quiera hacer prosperar la economía marmolejeña; lo último que que quieren ver estos falsos socialistas, ebrios de prepotencia, es que el personal no los necesite, que los vecinos dejen de arrastrarse por una limosna y se levanten con dignidad, autosuficientes e independientes.

Fuego, fango, piedras, rios de sangre, castigos horribles y sufrimientos bestiales esperan a aquellos que van recorriendo los diferentes círculos, fosas y giros que atraviesan el Infierno de Dante, donde multitud de personajes míticos, criaturas, diablos, furias, centauros y minotáuros vigilan el estricto cumplimiento de penas que son impuestas por una multitud de pecados tan extensa y variada como es la condición humana y el control que se requiere para someterla.

En Marmolejo a pesar de que las diosas de la venganza, funcionarios, concejales y correveidiles ejercen a diario la humillación que requiere su oficio, recordar el pecado de no pertenecer al partido ni a la legión de palmeros que lo siguen en procesión, sin escrúpulos y manejando a los ciudadanos en consecuencia, como ganado, títeres o apestados; a pesar de ello, y de ellos, del infierno que tienen por bandera y de sus injurias y presiones, a pesar de todo hay futuro, siempre lo habrá, solo hay que pelearlo. Del abismo se sale, saldremos, seguro, por nuestros propios medios, solo hay que superar la plaga de corrupción e incompetencia que asola el Ayuntamiento de Marmolejo.