Un abrazo Mariano."
Con las raíces en la humilde calle El Norte, ahíto del sentimiento de la historia vivida, nacido de la aventura de dar y encontrar sentido a lo cercano al alma aunque distante en el tiempo, del amor a la tierra y a las personas queridas, que en el fondo es lo mismo; este libro, que no es más que una prolongación del alma queriendo saciar la inquietud y la imperiosa necesidad de Mariano de traducir al verso sencillo lo complicado de la vida, tuvo una presentación magistral, arropada y disfrutada por amigos, compañeros que llenaron la Sala Verde, por una tarde, Sala de POESÍA.
Juego con ventaja, porque entré y salí un par de veces de la presentación, por la puerta del fondo que tanto ruido hacía, y me quedé todo lo que pude, que fue bastante, queriendo estar en dos sitios a la vez y lamentando no tener el don de la ubicuidad.
Tuve la sensación de que vida y poesía es un binomio demasiado poco frecuente y extremadamente necesario. Mariano, su historia, la de su familia en el Marmolejo difícil de primeros de siglo XX, las vueltas que da la vida por necesidad, las idas y venidas en la búsqueda de la paz y el sustento, la acumulación de vivencias y recuerdos, tan fuertes que aún hoy se pelean en caliente, todo al final encuentra su desfogue y su paz en la poesía, su reivindicación para la justicia y la memoria histórica y su huida del olvido, y en medio siempre Marmolejo. Todo un modelo a imitar, ¿quién sabe si pueda cundir el ejemplo?
Gracias Mariano. Te debo un saludo en persona.
Sí, seguimos debiéndonos un saludo personal, y, lo siento de verdad. Esperaba conocerte y "reconocerte" tu inquieta labor por los vecinos de Marmolejo. Es verdad también, que a veces hemos discrepado, (las menos), y más en las formas que en el fondo; porque claro, nuestro cariño y el respeto por nuestro pueblo y sus vecinos puede ser idéntico, pero no es lo mismo vivir en la cercanía los problemas del día a día que desde Valencia.
ResponderEliminarLo que sí que no se te puede negar son esas ganas de recuperar la dignidad de las buenas personas de nuestro pueblo, y tu trabajo difícil, (y no siempre comprendido), por la justicia y la libertad.
Quiero agradecerte las palabras que me dedicas, no me siento yo a gusto con los halagos, porque creo en el compromiso y el deber ciudadano. Que hay que devolver a la sociedad parte de lo que ella nos ha dado hasta llegar a ser una persona, (más o menos culta , libre, honrada, justa, solidaria, respetuosa...).
Siempre he admirado tu forma de escribir y el manejo del vocabulario... creo que comunicas muy bien y te animo escribir por el "gusto de escribir", da lo mismo que sea prosa o verso: escribe y ve recopilando recuerdos y sentimientos y algún día sácalos a la luz. Ese día serás de todos, y todos entre las manos te tendremos.
Gracias en nombre de mi familia, y en eso estamos, trabajando los buenos ejemplos.
Un abrazo Mariano.
Muchas gracias a ti, Mariano, por venir a darnos mucho más de lo que te llevas. Nos devuelves un episodio de nuestra historia viva, que la mayoría ni conocíamos. Qué triste es la ignorancia, y al mismo tiempo, como nos aferramos a ella; eché de menos más caras conocidas del pueblo que estoy seguro hubieran pasado un buen rato y bien aprovechado, por supuesto. Pero lo trágico y la realidad es que en Marmolejo, no hay costumbre. Dramático.
EliminarEn el fondo toda la lucha se resume en una apuesta por cambiar la sociedad mediante una "revolución" cultural, simple y llanamente. Una vez hecho esto, lo demás vendrá por añadidura. Por eso hacen falta muchas piedras como la que tu has puesto, para levantar el muro que tanto necesitamos para aislarnos de tantos malos hábitos, malas prácticas y malas ideas.
Recojo tu guante, y espero tener tiempo para escribir. La verdad es que el compromiso adquirido con mi pueblo, es muy absorbente, y espero sinceramente que esta fase de denuncia pase más pronto que tarde y de lugar a otra etapa mucho más tranquila y productiva. Hay un tiempo para cada tarea y una tarea para cada tiempo. O al menos eso dicen.
Un abrazo y salud.