Dicen que el sindicalismo se lleva en la sangre, pero en Marmolejo es en el estómago. Lástima de UGT.

UGT Marmolejo recurre los presupuestos municipales y entra en política en ayuda de un maltrecho y tocado Psoe.

Le he dado muchas vueltas durante mucho tiempo a escribir esto, pero clama al cielo el nivel de corrupción que hay en este digno sindicato. Marmolejo sigue padeciendo las consecuencias del caciquismo pseudosocialista. Hasta cuando?

Les debería de dar vergüenza, por no haber abierto la boca en los últimos veinticuatro años, que se dice pronto, donde estaban cuando muchas veces ha habido trabajadores en el Ayuntamiento sin contrato, o contratados irregularmente, sin estar dados de alta en la seguridad social, sin cobertura de ningún seguro, sin elementos de protección en los trabajos peligrosos, sufriendo accidentes graves que se acallaban con amenazas, sin derechos y sometidos al capricho de unos déspotas sin escrúpulos, trabajando más horas de la cuenta, recibiendo tratos vejatorios, insultos y voces, cuando no desprecios y amenazas o acoso, o simplemente cuando los funcionarios eran contratados a dedo... y ante todo eso, la UGT de Marmolejo, durante veinticuatro años, no ha dicho nada, callada como una puta. Peor aún, ha colaborado, amparado, justificado y permitido todo esto porque, y que quede claro, excepto algún caso honroso, la UGT ha sido la puerta de atrás de partido socialista, azote y látigo, sirviendo de instrumento para mantener un régimen personalista y caciquil de dudosa honradez y demostradamente antidemócrata. En resumen una vergüenza.

Hoy mientras el portavoz socialista, manolo, juraba que el psoe de Marmolejo, no tiene nada que ver con la UGT, que no saben nada de la impugnación de los presupuestos municipales que , para entendernos, significa poner otro palo en las ruedas de la administración local, paralizar el crear puestos de trabajo -dos municipales y un arquitecto- y sobre todo el evitar que las subvenciones municipales lleguen a las asociaciones que las necesitan, como la del alzheimer y otras, una vez más, los socialistas se reían del pueblo. Es curioso como esta familia, descabezada y embrutecida en su empeño de venganza, últimamente no para de meter la pata, se ponen en evidencia por su torpeza, amenazan al personal con represalias inimaginables cuando vuelvan al poder, rabian cociéndose en su propio jugo, el de la incompetencia y se comportan como si fueran las víctimas de un complot, como si su mala estrella no se la hubieran ganado a pulso, cuando la realidad es que no paran de recibir citaciones para dar cuentas de lo que han hecho y lo que se ha perdido, mientras el pueblo ha decidido que no paga excesos, mangoneos, fiestas, desvíos de subvenciones, ni mala gestión de nadie, ya está bien. Ya nos han chuleado durante demasiado tiempo, ni un minuto más.

Este sindicato, único y afecto al régimen cristobista, ha sido durante muchos años la única y obligada opción para los trabajadores municipales, y hay de aquel que no leyera. Los tiempos han cambiado y ya a nadie se obliga a afiliarse, aunque sabida es y conocida la mafia que compone la dirección de UGT en Marmolejo, conocidos son los que manejan el cotarro, en el sindicato y el partido a la vez, los que están porque no hay más remedio y los que entienden que es la puerta trasera por la que intentar la carrera política en el socialismo marmolejeño, estos últimos en plena faena de intrigas y trapicheos últimamente, que no ha servido para llenar la ejecutiva de los suyos, quizás, y aquí les dejo la reflexión, porque más les hubiera merecido la pena haberlo intentado solos y por derecho, que capacidad y merito les reconozco, y no apadrinados por los de siempre, para mayor gloria de los de siempre y dejar así en el abrevadero a los de siempre.

Estos días la UGT se ha cubierto de gloria, siendo desde que empezó la legislatura un arma arrojadiza del soe contra el pueblo, y antes contra IU, dedicada solo a la ralentización de la administración, sin proponer nada, siendo testigo muda de la mejora sustancial de las condiciones de trabajo de los trabajadores del Ayuntamiento, lo que parece incomodar más todavía a los dirigentes, aunque no así a los propios trabajadores.

Es una lástima y ojalá algún dirigente provincial leyera estas lineas y pusiera un poco de orden en este descontrol. A modo de anécdota contaré que, paradójicamente, cuando se les declaró a los miembros y simpatizantes de IU Marmolejo personas non gratas para la UGT y se les expulsó de su sede, hace ya dos veranos, coincidió que por aquellos días se organizaba una huelga general, la del 29 de Septiembre del 2010, convocada por UGT y CCOO, y fueron esos mismos militantes de IU los que, junto a algún histórico y honrado sindicalista, tuvieron que poner los carteles de UGT para llamar a los vecinos a la manifestación y a la huelga ya que, como se protestaba contra la políticas del Psoe y el PP, el alcalde socialista prohibió a la UGT poner ni un solo cartel. Otras veces, y no pocas, en las huelgas que se le hicieron a Felipe Gonzalez, mandaba a los mismos ugetistas a arrancarlos si algún compañero los ponía.

Esa es la independencia de la que hoy hacían alarde en el pleno los falsos socialistas desligándose de los falsos sindicalistas ugetistas marmolejeños, negando como unos Judas cualquiera y rasgándose las vestiduras porque decían no conocer a sus complices de tropelías, los que les han apoyado siempre a tener a los obreros en un puño, los herederos inmerecidos de una tradición sindicalista intachable de sus antecesores y que ellos han prostituido durante lustros al servicio de un cacique que les llenaba el yerbero con cuatro migajas. Mal va el Psoe local, muy mal, pero no quisiera ver que en su caída  se viera arrastrado un sindicato de tanta tradición e historia en Marmolejo, aunque viendo lo que hay, tendrá que pasar una generación para que desaparezcan estos guardias pretorianos de los señores del abuso y el despilfarro, estos estómagos agradecidos y aspirantes a agradar a los amos, politiquillos de taberna sin pena ni gloria, ni muchas luces pero dispuestos a hacer lo que se les diga aunque en las más de las veces no entiendan lo que pasa. Dicen que el sindicalismo se lleva en la sangre, pero en Marmolejo es en el estómago. Ánimo a la UGT, a pesar de la corrupción y servilismo que la dominan, y que limpie cuanto antes la era..