A las diez, rueda de prensa del PP en Jaén. ¿Se descifrará el misterio?

Hoy el PP de Marmolejo, dará una rueda de prensa en Jaén,
A las diez de la mañana, entonces tendremos más elementos de juicio para saber porqué han dado este paso tan importante, casualmente justo año y medio después de haber empezado a formar parte del gobierno municipal. Me temo que es posible que todo quede en un juego de palabras ya que la tarea comunicativa que tienen que asumir estos señores es ardua y peliaguda. Siempre es complicado vestir de limpio a uno de esos inconfesables galimatías políticos que se montan cuando la verdad solo la saben unos cuantos y la explicación al público es poco menos que imposible por inconveniente.

Los votantes de este partido están esperando una respuesta a la pregunta que nos hacemos todos, ¿porqué?. Hasta ahora solo han escuchado escusas más que respuestas y están a la espera de conocer el motivo que esté a la altura de la gravedad del paso dado, la explicación que les convenza, aunque no les tranquilice. Hoy la persona que ha liderado el abandono de gobierno local tiene una de las apariciones en público más delicadas de su carrera política y su misión no es otra que acabar con la incertidumbre, justificar sus actos y decisiones, dándole la vuelta a la tortilla de la realidad hasta que esté a su gusto y pueda ser consumida por un  público ávido de nutritiva información.

Confieso que estoy igual de deseoso de saber y conocer como mis vecinos, y espero que la luz de la honestidad y la sinceridad iluminen las palabras del portavoz del PP.

Sé que son días difíciles para los que han tomado la decisión de irse, apresurada a mi parecer, y que no es fácil dejar las tareas y la gestión a medias, quedándose al margen de un proyecto que se ha abanderado con orgullo y eficiencia durante muchos meses. Por eso no envidio la situación de estos concejales que, teniendo la oportunidad de seguir en la brecha trabajando por sus paisanos, han tenido que dejarlo todo y abandonar por imperativo de partido la obra emprendida. Lo siento por ellos, estoy seguro que la mayoría no están orgullosos de esta decisión, igual que muchos vecinos afines a su ideología.

El problema es canalizar la frustración, la propia y la generada en los que les rodean, sin cometer el error fácil de cargar acusaciones y culpas en terceras personas, para desviar la atención del problema principal y aliviar la presión. Eso, en este caso, no valdría de nada porque no solucionará el problema de fondo y solo empañaría la realidad de una aventura política osada e imprevista, puede que con extraños compañeros de viaje, pero realizada desde la decencia y nacida de necesidad de un pueblo oprimido de aire fresco democrático, transparencia y honradez.

Como al final todo se sabe, siempre pasa, y como quejarse no sirve de nada, mientras el personal se va explicando o no, lo natural y necesario es ir pasando página, normalizar la situación, seguir trabajando y seguir demostrando el movimiento andando. Hay tiempo de sobra para deshojar esta margarita, pero los  problemas de los vecinos no pueden esperar.