Aumento del paro. Aumento de la esclavitud.

Hay dos noticias, de hoy mismo, que me han llamado la atención.





Una a nivel nacional, en el periódico El Mundo, en la que el ministro Corbacho reconoce que llegaremos este año al 20 por ciento de paro. No me atrevo a ponerle un número real de parados al ejercicio actual basandome en que este gobierno tiene por norma negar siempre la realidad incluso cuando ya es demasiado evidente que mienten. Un escalofrío ha recorrido mi cabeza y por un momento he revivido mis peores pesadillas. Si alguien sabe rezar... este es el momento. Esto es como poner un pirómano a apagar un fuego.





La otra viene en el Pais.com y habla del aumento de la esclavitud en el mundo con la crisis. Me ha hecho recordar el dicho aquel de que "por mal que estemos siempre hay por ahí alguien peor que nosotros". Y es cierto siempre hay alguien por ahí quen está peor, lo que pasa es que cada día somos más los que casi cualquiera está mejor que nosotros. Estamos en un punto en el que es preferible, no tener nada, que haberse tragado el anzuelo consumista, en pos de una vida mejor llena de propiedades, y ahora terminar endeudados hasta el cuello esperando la inesistente compasión de los bancos.




¿No es una nueva forma de esclavitud, de los paises desarrollados, el endeudamiento extremo?; el levantarse por la mañanas a trabajar, si tienes trabajo, casi exclusivamente para el banco, para comer con las sobras del recibo de la hipoteca, viviendo angustiosamente en una casa que puede ser embargada en cualquier momento y manteniendo una vida carente de casi lo más básico. Todo lo contrario que pretendíamos cuando nos acercamos al banco prometiendolas más felices. ¡Que ilusos!. Y máxime el que sea uno de estos infelices que se arrimó a la hipoteca durante el último año antes de la crisis cuado todo estaba por las nubes y ellos, los bancos, aunque lo niegen ¡¡YA LO SABIAN!!!!!!

sonetos



21/05/08
AL BANCO

1
Al pie que cierra la puerta, maldito!
traidor que regalas miseria
nadie te dio pase para esta feria
nadie te vio llegar tan despacito.

Tanto olor a muerto te acompaña
que te oigo bien cuando te acercas;
no hay escape a esta angustia puerca
se agarra al pecho un dolor que no engaña.

Hágase tu voluntad, asesino
que la mía ya ni puede ni quiere
seguir, ni huyendo ni luchando.
Quizás ahora aprenda que mi camino
sea el dulce olvido del que me hiere
y simplemente me vaya olvidando.

2
A la mano que no se tiende, perra!
que solo conoce aprovechamiento
que solo espera llegue el momento
de alimentarse con carroña de guerra.

Mezquinos que se arrastran por la tierra,
los peores sordos al rajao lamento,
desposeídos de cualquier sentimiento
amenazan con la garra que se cierra.

Disfruten ya el plato sus señorías
que a esta nueva legión de esclavos
no se les abrieron los ojos todavía.
Disfruten mientras no les llegue el día
que no valgan para nada sus legajos
que no les sirva ni un Ave María.

edmundo serna ruz