La suciedad del que limpia.

Utilizar las fachadas del centro como tablón de anuncios, lejos de ser un capricho o una gamberrada, es una necesidad. Antaño hubo tablones en algún que otro sitio pero se fueron perdiendo y no se han reemplazando. Ya que tenemos una amplia red de parques no estaría mal reivindicar desde aquí mobiliario lúdico infantil y un buen tablón para carteles y anuncios en todos y cada uno de ellos.

En especial llama la atención la fachada de Unicaja, junto al Ayuntamiento, que es la que peor está y precisamente por culpa de una propaganda socialista de hace demasiados meses. La verdad que suena a paradoja que el partido político encargado de velar por la limpieza del pueblo, sea el que tiene fachadas, farolas y señales de tráfico hechas una porquería a base de pegatinas y carteles de campañas electorales ya olvidadas. A no ser que esto sea una especie de recordatorio de que lo que ellos hacen lo que les da la gana. A mi no se me olvida.

Otra cosa es que a los de la caja no les importe y hagan la vista gorda en el marco de las especiales relacciones que hay entre el consistorio y la entidad bancaria.

A nosotros en cuaquier caso no nos parece de recibo ciertas practicas poco "limpias" y aunque otros las toleren o miren para otro lado o las vean "normales", a todas luces son como poco una guarrería.