El problema del paro, la repercusión que tiene en las familias marmolejeñas, en su ánimo, su día día, sus proyectos y las angustias personales de los padres de familia que ven mermada su capacidad para atender a los suyos, es la mayor de las preocupaciones que hay, ahora mismo, en Marmolejo.
La impotencia y la incertidumbre se han instalado en el ánimo de muchos trabajadores y en las casas se vigila al céntimo los gastos de las exiguas economías domesticas. En este ambiente, no es de extrañar que cualquiera que tenga un empleo estable se considere afortunado y lo cuide como si de un tesoro se tratara. Además, ante la escasez de oportunidades, cualquier oferta de un puesto de trabajo es de agradecer y si esa plaza se obtiene en la administración pública, en cualquiera de sus acepciones, incluida la municipal y las empresas públicas de servicios municipales, pues muchísimo mejor ya que se queda fuera de los vaivenes del mercado y los peligros a los que se enfrenta el sector privado.
Lo que sucede es que mientras que en cualquier empresa privada, para optar por un empleo, el aspirante tiene que cumplir una serie de requisitos que hagan merecedor del puesto de trabajo, en la administración local, y aún estando perfectamente reglado este extremo, hay mucha facilidad para obtener trabajo mediante la única condición de tener el enchufe, adecuado y en este caso, de tipo político.
El favoritismo, el amiguismo, la prebenda, el chollo, el momio, la sinecura o como quieran llamarlo, lo conseguido con el único esfuerzo que el conocer a las personas adecuadas y militar en el partido que tiene el acceso a los mecanismos de contratación y la catadura moral, también adecuada para hacer de su capa un sayo y saltarse los protocolos establecidos, es lo que más se ha estilado en Marmolejo.
Lo que pasa es que esta práctica, mantenida en el tiempo durante muchos años, ha creado una red de corruptela y clientelismo político, perfectamente organizada que se ha dado en llamar Partido Socialista Obrero Español de Marmolejo, donde concejales, candidatos y exconcejales, sus familiares más o menos directos, cuadros del partido y familia además de diversos afiliados ocupan indefectiblemente diferentes puestos en el Ayuntamiento, Diputación y Empresas Públicas de la comarca.
Esta y no otra es la explicación al nerviosismo que se respira en las filas socialistas, cada vez que se acercan una elecciones municipales y la agresividad manifiesta en parte de su militancia, la cual se busca intencionadamente ya que el alcalde insiste a diario que los partidos de la oposición solo tienen como objetivo el perjudicar a los trabajadores municipales y allegados al Psoe. Nada más lejos de la lógica democrática, pero jugar con el miedo de lo demás ha sido siempre una baza muy utilizada desde el Consistorio. Una forma de terrorismo soterrada y muy efectiva que se resume en un mandamiento fulminante: “Como yo te he colocado a ti o algún familiar tuyo, vótame y odia a los que quieran ocupar mi puesto, porque ellos os quitarán el trabajo”.
Fruto de esta demoledora premisa, hablar de Democracia, de Alternancia en el poder, en los cargos electos de la administración local, e incluso internamente en el Psoe de Marmolejo, suena a atentado contra el comer de muchas familias, y por lo tanto a guerra declarada entre partidarios del alcalde y el resto del espectro político local, incluidos algunos socialistas, para ellos todos son “fascistas, enemigos a machacar, tripartito...”, no hay mas que ver , como ejemplo, el facebook de algún joven candidato del Psoe a concejal en el que “gentuza y jilip...” es lo más flojo que se les llama a los ciudadanos, aún sin conocerlos de nada, que no simpatizan con el Psoe.
Me duele profundamente el abismo en el que se quiere terminar de hundir al pueblo de Marmolejo, al que por la ambición desmedida de algunos, ya se le ha hecho muchísimo daño. Y desde aquí les pediría que si de verdad les importa su pueblo, si les importamos esos a los que nos llaman queridas y queridos marmolejeños, que dejen este simulacro de guerra fratricida en el que nos están metiendo, esta escalada del miedo de unos a otros, de la desconfianza y el odio sin conocernos y esta caza de brujas de los sospechosos de no colaborar con el régimen.
Solo pido una oportunidad para la Democracia, no es tanto, a Marzo del 2011.
Ojalá si la Democracia no la ves ahora en Marzo, espero que la vivas en Mayo...y para siempre
ResponderEliminarHoy os quiero dar las gracias a la gente de IU, ya que estáis haciendo trabajar y estáis poniendo muy nervioso al mismísimo alcalde. Nunca he visto tanto miedo y lo malo es que a dos meses lo están arreglando e inaugurando todo. Eso pasará factura.
ResponderEliminarEs lamentable que a estas alturas se esté pidiendo democratización de las instituciones públicas cuando debieran de ser ellas mismas garantes de las libertades.
ResponderEliminarEsto solo pasa en Marmolejo. Pero lo que está claro es que sin Democracia no habrá una solución limpia para los problemas de desempleo y solo tendremos más de lo mismo.