Diego Valderas dice que no es de los que saben jugar al billar, pero yo solo veo que esto pueda salir bien, de carambola.

Seamos serios: o ponemos en cuarentena al Psoe o nos terminará contagiando su enfermedad.

Nos queda una semanita muy movida, por un lado los del PP que han aprendido a decir "ajustes" en lugar de "recortes", se han envalentonado y , como el que hace un cesto hace un ciento, pues nada a meter la guadaña, que las tijeras se les habían quedado chicas y a recortar del todo la Sanidad, la Educación y a sacar en dos días, en cuanto nos descuidemos, el fantasma del copago, bien para amenazar y que terminemos diciendo lo de "virgencita, que me quede como estoy", o bien para irnos haciendo el cuerpo para lo inevitable.

Lo del pacto IU-Psoe, ya hay que darlo por hecho, solo queda saber hasta donde la incontinencia política de Valderas, nos deja con el culo al aire. La presidencia de la Cámara y... qué mas da cuantas consejerías o si al final intentarán callar la boca a Gordillo con algún caramelo, que estoy seguro que lo intentarán.

Pasen y vean, el espectáculo está servido, porque el caso es que esta semana veremos magia, y de la buena, por arte de magia cambiará la percepción de la realidad para que las cuentas sigan saliendoles a los de siempre; a los dos grandes. Que me digan si no es bipartidismo, que aún hoy, la cuestión sea elegir entre PP y Psoe. Que me digan si al margen de lo que haga IU, la pelea de gallos no es entre Psoe y PP, Madrid y Sevilla, hacerse la puñeta uno al otro, que entre el eterno candidato, Arenas, o dejar a Griñán que siga escondiendo debajo de las alfonbras de San Telmo toda la porquería que quiera.

Diego Valderas dice estos días que no es de los que saben jugar al billar y que el Psoe pierde aceite, pero yo solo veo que esto pueda salir bien de carambola. Los socialistas buscan permanecer, que no es poco, y reorganizarse, oxigeno, se llama eso, y de camino si nos pueden pisar un poquito el cuello, pues mejor. Los del PP que ven perderse en la lejanía la Presidencia de la Junta, ya no tienen pudor, ni porqué mirarle la cara a nadie y dicen aquello de que "si no queréis caldo, pues vais a tomar dos tazas llenas", arrecian con sus "ajustes", que no recortes, preparando el cerco y asalto a la Junta vía asfixia económica y acribillamiento en sanciones y fiscalización extrema, hasta que nos canten las cuarenta y se lleven las diez de últimas, y es que los andaluces nos la hemos buscado solos, ea castigados  por no votarles!. Esto ¿donde nos deja?

Entre medias de todo esto, nosotros, en nuestro propio mundo y nuestra propia guerra, estamos  creídos de que contribuiremos a parar la ola de la derecha en Despeñaperros, sin fijarnos que le Psoe es de derechas, y que acudimos a nuestra cita con la historia, para no defraudarla, cuando no es nuestra misión ser la muleta de nadie, ni el Psoe nos va a agradecer que le salvemos el culo, todo lo contrario, las posibilidades de que nos dejen hacer una transformación real de Izquierdas en Andalucía, si se la comentamos a Griñan se descojona de risa.

Los socialistas, tienen el defectillo de creerse que son eternos en el poder y eso solo se cura el día en que se queden en la calle o tengan que hacer un pacto duro, muy duro, lo suficientemente duro como para que la corrupción salga sola corriendo y se denuncien unos a otros, den cuentas a un juez de los últimos treinta años de desmanes en la Junta, Diputaciones y Alcaldías, ese día, el día que se pongan en cuarentena el Psoe-A, aprenderán la lección de que no son los inmortales semidioses de la política andaluza y que todo lo que empieza tiene un fin, sobre todo si no es honrado. Amén de todo esto, para empezar, habría que poner encima de la mesa, antes de negociar, algo muy parecido o en la linea de lo que pedía Gordillo en Paradas:" cuatro meses de empleo público para todos los parados, una renta básica para todas las familias, la prohibición de desahucios y un banco público para invertir en economía productiva"; el pensamiento y el alma en los que lo están pasando canutas, primero eso, luego eso y después eso. Entre tanto habría que crear mecanismos para que se cumpliera el programa electoral de IU y que no se regenerara la corrupción inherente al partido socialista, cosa que no pudieron evitar en su momento ni Gonzalez, ni Zapatero, lo que se consigue solamente con mecanismos de vigilancia interna y la participación ciudadana directa y efectiva en la Junta.

Yo soy de los que se creyeron los mensajes de campaña, puse carteles y colgué pancartas, fui a los mitines e incluso fui a ver a Juan, a Cayo y a Diego en cuanto tuve oportunidad. Y francamente, no se si soy poco realista y me cuelo de agorero, pero no veo claro si podremos contener este incendio, de la derecha desmadrada, con nuestra escasa reserva de agua a no ser que la concentremos en el foco, calculemos muy bien todas las variables y recemos todo lo que hemos olvidado y no sabemos. Si no, terminaremos refugiándonos, otra vez, en la caverna, lamentándonos otros cuantos años, y volveremos a hacernos el cuento de la lechera en el país de nunca jamás. Seamos serios y cautos, por favor.