Pobrecito mi patrón, piensa que el pobre soy yo.
Algunas veces en la vida, nos sorprende el comportamiento de ciertas personas que por la relación cotidiana e incluso por cercanía de amistad en nuestro entorno social, mantenemos en un concepto bien diferente al que en determinados momentos manifiestan con su actitud impropia y rompedora de los esquemas, que acerca de ellas teníamos prefabricados, y ¡ojo!, que nunca hay que tener miedo a “romper esquemas” si ello supone una innovación, un paso hacia delante, pero nunca una involución como parece ser el caso que nos ocupa.
No culpe usted, Sr. Herrera, a la LAULA de haber sido culpable de la pérdida de la condición de Entidad Local Autónoma del Poblado de San Julián, seamos sinceros y coherentes, porque detrás de la herramienta que permite y facilita el trabajo, está el brazo ejecutor, está la decisión política y usted fue su mayor artífice junto con su, por entonces, socio de gobierno y actual alcalde de Marmolejo, diga se también de paso, que a todas luces, fue una decisión acertada y ahí estuvieron los vecinos, apoyando y dando aliento desde el primer momento, acuérdese por sí lo ha olvidado, que obtuvo en las elecciones, con votos legítimos cien por cien, no se puede decir lo mismo de los que obtuvo quien “las ganó” y a los informes técnico-jurídicos me remito, la confianza de la Asociación vecinal que allí existe, ¡qué mal le está correspondiendo!.
Pierda usted cuidado, no se atormente ni tenga resentimiento, no ha cometido ningún atropello, aunque estuvo a punto, el alto precio y la pérdida de derechos que tanto le preocupa, ya lo venían sufriendo los vecinos de ante mano. Vuelva usted a leer los informes técnicos y la resolución final de la Junta de Andalucía para recuperar, por lo menos, la confianza en usted mismo, que dada su ambigüedad tal vez sea la única que pueda recuperar, y tener la certeza de que San Julián llevaba mucho tiempo al margen de la ley.
Asombra e incluso molesta ver cómo siendo usted conocedor, porque lo ha vivido en primera persona, de la gran brecha en la sociedad marmolejeña abierta por los abusos de poder y la opacidad en la gestión del anterior alcalde, siga usted hurgando en la herida. Deje de una vez que cicatrice, que sane adecuadamente, acabemos con los gérmenes patógenos que pretenden seguir infectándola, aquí ya huele demasiado a podrido, no siga coqueteando con quienes nunca han dejado de mirar a su bolsillo y menos aún con un pobre diablo que se ha quedado sólo. Este es el mensaje que lanzó la mayoría del Pueblo de Marmolejo en las pasadas elecciones municipales, pero usted parece no haberlo captado aún, tal vez no le interese el camino de la reconciliación y la transparencia que por lo menos, en San Julián, se pretende recorrer, no vuelva a mentar la soga en la casa del ahorcado, su propuesta, tan adornada y camuflada con aquello del “sufragio universal entre todos los vecinos”, es perversa y sospechosa de atender a oscuros intereses u objetivos que requieren seguir manteniendo la discordia y el enfrentamiento, todos en Marmolejo sabemos a quién le funcionó esa estrategia y lo que desgraciadamente consiguió.
No culpe usted, Sr. Herrera, a la LAULA de haber sido culpable de la pérdida de la condición de Entidad Local Autónoma del Poblado de San Julián, seamos sinceros y coherentes, porque detrás de la herramienta que permite y facilita el trabajo, está el brazo ejecutor, está la decisión política y usted fue su mayor artífice junto con su, por entonces, socio de gobierno y actual alcalde de Marmolejo, diga se también de paso, que a todas luces, fue una decisión acertada y ahí estuvieron los vecinos, apoyando y dando aliento desde el primer momento, acuérdese por sí lo ha olvidado, que obtuvo en las elecciones, con votos legítimos cien por cien, no se puede decir lo mismo de los que obtuvo quien “las ganó” y a los informes técnico-jurídicos me remito, la confianza de la Asociación vecinal que allí existe, ¡qué mal le está correspondiendo!.
Pierda usted cuidado, no se atormente ni tenga resentimiento, no ha cometido ningún atropello, aunque estuvo a punto, el alto precio y la pérdida de derechos que tanto le preocupa, ya lo venían sufriendo los vecinos de ante mano. Vuelva usted a leer los informes técnicos y la resolución final de la Junta de Andalucía para recuperar, por lo menos, la confianza en usted mismo, que dada su ambigüedad tal vez sea la única que pueda recuperar, y tener la certeza de que San Julián llevaba mucho tiempo al margen de la ley.
Asombra e incluso molesta ver cómo siendo usted conocedor, porque lo ha vivido en primera persona, de la gran brecha en la sociedad marmolejeña abierta por los abusos de poder y la opacidad en la gestión del anterior alcalde, siga usted hurgando en la herida. Deje de una vez que cicatrice, que sane adecuadamente, acabemos con los gérmenes patógenos que pretenden seguir infectándola, aquí ya huele demasiado a podrido, no siga coqueteando con quienes nunca han dejado de mirar a su bolsillo y menos aún con un pobre diablo que se ha quedado sólo. Este es el mensaje que lanzó la mayoría del Pueblo de Marmolejo en las pasadas elecciones municipales, pero usted parece no haberlo captado aún, tal vez no le interese el camino de la reconciliación y la transparencia que por lo menos, en San Julián, se pretende recorrer, no vuelva a mentar la soga en la casa del ahorcado, su propuesta, tan adornada y camuflada con aquello del “sufragio universal entre todos los vecinos”, es perversa y sospechosa de atender a oscuros intereses u objetivos que requieren seguir manteniendo la discordia y el enfrentamiento, todos en Marmolejo sabemos a quién le funcionó esa estrategia y lo que desgraciadamente consiguió.