Ya queda menos y no hay marcha atrás.

Hace dos días que tomó posesión la nueva Secretaria, de carrera, del Ayuntamiento de Marmolejo y la tarea para encontrar un Interventor  está muy avanzada. Ahora, con la Ley en la mano y con personal cualificado, está empezando a verse la luz en este mundo de tinieblas de gestión municipal socialista, y  la claridad que se ve al final del túnel, es la bombilla de la puerta de los juzgados. Está llegando la hora de la verdad, la que esperábamos la mayoría de los marmolejeños y que tanto temen los que han campado a sus anchas con las leyes por montera, el poder absoluto y el desprecio al pueblo.

Han pasado cinco semanas desde la toma de posesión del nuevo Equipo de Gobierno y la toma de contacto con la realidad municipal ha sido más esclarecedora de lo que cabría pensar, las cosas estaban peor de lo que se esperaba y las irregularidades en la gestión a todos los niveles alcanzan proporciones alarmantes. Ni a "cosa hecha" se podría haber gestionado más nefastamente, menos mal que se ha puesto fin a estos desmanes jurídicos, administrativos, económicos y políticos, porque la ruina, el engaño y alegalidad en la que se ha gobernado y sumido al pueblo de Marmolejo es insostenible.

Ya queda menos, pero si hemos sido capaces de esperar 24 años bajo el yugo de la tiranía, seremos capaces de esperar solo unos días más a que se vayan desenredando los hilos de la telaraña marmolejeña y que en tiempo y forma, oficialmente, se pongan las evidencias sobre la mesa para que el Pueblo y la Justicia den su opinión y veredicto en esta trama que no está haciendo más que empezar a vislumbrarse y  que se intuye muy interesante y didáctica, aquí vamos a enterarnos de mucho de lo que se ha ocultado con celo durante muchos años.

Nos aseguran que dará muy próximamente cumplida información, exhaustiva y pormenorizada de la situación real del municipio y de las medidas adoptadas, y que llegará, sin ninguna duda a todos los vecinos en las próximas semanas. De nada sirven ya las cortinas de humo y el desviar la atención, de las personas que temen que los marmolejeños se enteren de una vez por todas de lo que pasa y ha pasado en su ayuntamiento en los últimos años, las irregularidades, las deudas y las actuaciones arbitrarias y marginales a la ley, porque está llegando la hora de dar cuentas y ya no hay marcha atrás.

Un par de temas sobre los que estos últimos días se está hablando por el pueblo son el asunto de la desaparición del ayuntamiento de doscientos curriculums vitae, los primeros que se han recogido para ir confeccionando la bolsa de trabajo municipal y que, misteriosamente, no se encuentran en las dependencias municipales. El hecho está denunciado y se está investigando al respecto. Así andamos, pero seguimos adelante.

Otro asunto es el de la cancelación del llamado Empleo Juvenil, y sobre esto hay que informar, y se informará extensamente por los responsables, y es que no se puede tener a los jóvenes de Marmolejo incumpliendo los objetivos del Plan de Empleo Juvenil, sin contrato, trabajando en tareas ajenas a sus estudios y expuestos a riesgos laborales sin cobertura legal de seguridad social, ni seguro de responsabilidad civil, cobrando precariamente, (todavía se debe Empleo Juvenil del año pasado), solo porque así sea más barato realizar las tareas y trabajos municipales y más popular entre los jóvenes que son ajenos a estas precariedades, pero que en el fondo solo se busca que el trabajo que se les niega a los padres, lo hagan los hijos por una propina y si dar de alta en ningún sitio. La jugada es redonda, si nos olvidamos de que es ilegal, injusta y peligrosa, lo lamentable es que durante años se nos ha vendido la burra como la joya de la corona y una experiencia pionera y única, y la suerte es que a ninguno de los jóvenes la haya pasado ninguna desgracia en este tiempo.

 Este empleo juvenil, habrá que reestructurarlo en el futuro para dar a las personas que lo soliciten una oportunidad de desarrollar sus estudios y capacidades, bien en convenios con centros de trabajo o en áreas municipales que estén relacionadas directamente con sus intereses. Pero no quepa duda que lo que se haga no va a poner en riesgo la vida de nadie ni se va a hacer por la puerta trasera con engaños ni ilegalidades.