Es hora de pedir responsabilidades...

LA AGENCIA ANDALUZA DEL AGUA EN JAÉN PUDO EVITAR LA DIMENSIÓN ALCANZADA POR LAS INUNDACIONES PRODUCIDAS EN LA COMARCA DE ANDÚJAR


El PCA pide a José Castro tranquilidad y reflexión sobre la experiencia vivida con las últimas inundaciones


El Partido Comunista de Andalucía en Jaén en ningún momento ha pretendido “intranquilizar” a la sociedad, al contrario, ha dejado pasar tres semanas para pronunciarse de forma serena y con datos en la mano. Una de las obligaciones esenciales de los partidos políticos es informar a la sociedad de lo que ocurre con los organismos públicos, guste o no a los gestores de los mismos.

La opinión del PCA es compartida de forma generalizada por personas afectadas, agricultores, trabajadores agrícolas, industriales, ingenieros y geólogos que consideran con sentido común que la Agencia Andaluza del Agua debería haber aprovechado los días de calma climatológica previos a las inundaciones para planificar en la medida de lo posible desembalses controlados, ya que los pantanos estaban al cien por cien y seguían recogiendo escorrentías.

El PCA no critica el sistema de desembalse, critica la falta de previsión de la Agencia, que con los medios técnicos con los que cuenta, tenía que haber previsto lo que iba a pasar, teniendo en cuenta también las lluvias y los lodos acumulados, sobre todo desde La Ropera hacia Andújar, que es donde ocurre la gran decantación por el efecto de frenazo del agua; además de tener la mota sin terminar por no declarar de urgencia las obras.

Para más inri, al Ayuntamiento de Andújar se le manda un plano con el estudio hidraulico de detalle del río Guadalquivir en el tramo La Ropera-Andújar, fechado en julio de 1.997, cuando el Plan de Emergencia de Andalucía data de 2.002.

En la anterior gran inundación de la zona, en 1.996, pasaron por Andújar 1.000 m3/segundo y ahora han pasado poco más de 1.500 m3/segundo y han causado inundaciones a pesar de contar en 2.010 con la mota protectora casi terminada.

Las decisiones de carácter técnico se habrán tomado evaluando los datos minuto a minuto, pero los datos eran tan contradictorios que denotaban la falta de coordinación interna entre Sevilla y Jaén. Así es cuando se informa al Ayuntamiento de Andújar que el caudal que se esperaba es de 2.500 m3/segundo, después se eleva a 2.800 m3/segundo, a reglón seguido se baja a 1.800 m3/segundo, después se baja la previsión a 1.500 m3/segundo. Todo en cuestión de horas

En realidad a las 14 horas del día 23 de febrero, la misma Agencia informaba que el caudal que pasaba por Andújar era de sólo 1.070 m3/segundo. A todo esto el “aforador” situado en Mengíbar “desaparece” a las 12 del mediodía del 23 del febrero, incrementando la incertidumbre de técnicos y políticos, hasta tal punto que la Delegación del Gobierno de la Junta en Jaén emite un comunicado trasladando el puesto de mando del comité asesor del Plan de Emergencia al parque de bomberos de Andújar porque de los datos de caudales, registrados en ese momento a la altura de Mengíbar, el río llevaba más de 2.000 m3/segundo. Todo motivado por una avenida de agua desde el caudal del río Guadalbullón hasta el del Guadalquivir. De otra parte, según la Agencia del Agua el nivel del Guadalbullón en Mengíbar se encontraba fuera de servicio.

El PCA tiene los suficientes fundamentos técnicos, y sobre todo, políticos, para exigirle al delegado provincial de Medio Ambiente la realización urgente de los estudios necesarios tendentes a conocer la incidencia real que ha podido tener la acumulación de lodos en el cauce del río Guadalquivir, la falta de terminación de la mota y el no mantenimiento de las riberas del río.

Los comunistas jienenses también exigen al Sr. Castro que no “mareé más la perdiz” y acelere las medidas necesarias para que la Presa de Marmolejo deje de ser un obstáculo en el cauce normal del río Guadalquivir y no suponga la causa principal de las inundaciones que se sufren.


Jaén, 17 de marzo de 2.010