El Estado de Derecho garantizará el futuro democrático en Marmolejo.

La libreta negra del fracaso.
¿Quién teme al lobo feroz?


En Marmolejo, a la entrada del paseo, en el monumento a la Pepa, hay una leyenda que dice: " España se constituye en un Estado social y democrático de Derecho, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia...",  así comienza el primer artículo de nuestra Constitución, lo hemos tenido todo este tiempo tan cerca, y tan lejos a la vez. La solución a nuestros males y la protección de nuestra dignidad como pueblo, pasan por aplicar esta Ley fundamental , Ley de leyes y salvaguarda de los ciudadanos frente a los abusos de la autoridad. Claro que hasta hace poco no había quien la hiciera cumplir.

La Democracia proporciona ladrillos, hormigón y piedra, o lo que es lo mismo, la Justicia, el Estado de Derecho, para construir con solidez una casa común, la  que ha de protegernos a los demócratas de los ataques externos de indeseables codiciosos dispuestos a asaltar por la fuerza, lo que no han podido ni sabido obtener por medios democráticos. Y es que el enemigo nunca duerme, el ansia de poder no le deja, ya que el poder, en ciertas manos, lejos de significar servicio a la comunidad, se convierte en fuente de humillación y vejaciones, una especie de sadismo enfermizo al que están abonados muchos de los enemigos del pueblo, sobre todo esos  falsos socialistas que se disfrazan de salvapatrias y perdonavidas.

El pueblo, que no es tonto, aunque quieran manipularlo a perpetuidad, en cuanto ve un techo y una paredes suficientemente sólidas, como para no temer a los que lo quieren secuestrar y exprimir, se relaja y enseguida aprecia los valores y ventajas de un sistema ya antiguo, pero desconocido hasta ahora, el democrático amparo frente al abuso y la ley aplicada con igualdad,equidad, justicia, ecuanimidad e imparcialidad.

Toda una gozada para el sentir popular de que Marmolejo ya no es una selva, donde los depredadores y carroñeros se ocultaban tras una maleza institucional, en la que unos comían de la olla gorda mientras otros eran devorados por la exclusión y /o perpetuamente vigilados y amenazados, cuando no extorsionados para que fueran complacientes y siguieran los "cauces normales de la casa", en cuanto a consumir los productos (políticos, financieros y profesionales) que ofrecían la casta dominante, so pena de represalias.

Hoy, queda mucho por hacer, mucho o todo por destapar, mucho por informar y muchísimo por gestionar. Por el momento lo que si se está viendo es el carácter diametralmente opuesto del talante, gestión y trato con los vecinos, el Equipo de Gobierno ha dejado de estar en la "mesa presidencial" de la sociedad marmolejeña, para estar entre los que sirven a su pueblo, el Alcalde ha dejado de ser el látigo negro que "ni olvida, ni perdona", amigo de sus leales y enemigo del resto, para ser un servidor público, accesible y humano, con todo lo que conlleva esto.

El alcalde de Marmolejo, ya no tiene la obligación de ser el macho alfa de ninguna manada, no necesita liderar a un nutrido grupo de gregarios sumisos a los que mantener a raya, no tiene que ser el más listo del mundo, ni el más prepotente, ni el más guapo, ni el que más amigos tenga en la política, ni el que más cargos acumule, porque el Alcalde de Marmolejo, se debe a su pueblo y no al contrario, como demuestra todos lo días Bartolomé Soriano, porque es un trabajador más que se esfuerza a diario, codo con codo, junto a los demás trabajadores del Ayuntamiento, léase concejales, funcionarios y contratados, para sacar adelante este proyecto llamado Marmolejo,  porque es humilde, cauto y demócrata y pide opinión a los que le rodean,  porque tiene claro cual es su sitio y no ambiciona el sillón, sino hacer bien su trabajo, porque se centra en sus vecinos y no necesita pavonearse ni medrar ni intrigar, no es su estilo, y porque ya está bien de ver las cosas desde el punto de vista de un alcalde, todos tenemos derecho a tener una opinión sin pensar si eso nos va a poner en conflicto o no con la autoridad de turno.

Lo que no es de recibo, es que a estas alturas y con el único propósito de mantener el miedo, un miedo que ya han perdido casi todos los marmolejeños y que solo persiste en las personas que no se fían si lo que están escuchando es obra de un loco o es una vacilada, se esté anunciando a bombo y platillo que hay una libreta negra donde están apuntados "todos a los que hay que cortar la cabeza cuando volvamos yo y los míos". Obviamente el de la libreta es cierto concejal que no se entera que, en España, perder una alcaldía es un acto democrático y no un pistoletazo de salida para crear una espiral de amenazas, boicoteos, odios y tensiones que asfixie la normalidad democrática y poder pescar adeptos en el río revuelto del engaño y la mafia. No se entera y no se va a enterar nunca, pero lo que no vamos a consentir los marmolejeños que eso no desvíe ni un milímetro del camino y el derecho que tememos a vivir en paz y perseguir dignamente esa felicidad, que algunas veces es tan esquiva, sin que venga, por añadidura, ningún tonto a jodernos, que bastante tenemos con la ruina que nos han dejado.

Lo importante es que hay herramientas para garantizar que no habrá vendettas, ni represalias, ni corta de cabezas, ni habrá una cruenta "reconquista" del poder, ni vienen escabechinas de los que no mantengan la lealtad al antiguo régimen "cristobista", ..., se acabaron las purgas desvergonzadas, las herramientas son las que pone la Constitución en nuestra manos, siempre han estado ahí, pero ahora es cuando nos vamos a enterar, porque es ahora cuando la Ley va a poner a cada uno en su sitio.