jueves, 19 de noviembre de 2009

Se agotan los recursos, la paciencia y las personas.

La campaña de la aceituna está empezando y la verdad es que nos estamos encontrando todo tipo de problemas. El fruto tiene un tamaño muy pequeño, dándose el caso de que ha empezado a haber problemas con las cribas de alguna almazara. El precio, se ha desplomado muy por debajo del umbral de rentabilidad y ya ronda los 2,018 euros el kilo. El tiempo no acompaña y ya ha sido reconocido este mes de noviembre como el más cálido de los últimos 25 años.


Los 1334 guardias civiles de la provincia, que tendrán que ser reforzados para controlar a los 100.000 jornaleros que trabajarán este año en los tajos, intentaran evitar el fraude que CCOO estima en 2.000.000 de jornales.


Entre tanto, las organizaciones agrarias se organizan para un fin de semana de protestas y manifestaciones.

La ruina está servida, ¿cuanto aguantarán los agricultores poniéndole dinero encima a las explotaciones? Por su parte el gobierno los considera su problema menos importante. Y a la gente, que anda muy quemada, le va quedando muy poca paciencia y menos recursos.


A todo esto, ¿cuando se le va a decir algo a los intermediarios y a la madre que les parió?
Gráfico del la evolución del precio del aceite de oliva virgen en el último trimestre.

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