Zapatero vulnera la ley y continúa fumando en el avión presidencial
El Falcon del presidente del Gobierno huele a LM Light, la marca de los pitillos que Rodríguez Zapatero enciende en su interior, ajeno a la prohibición de fumar en espacios públicos cerrados, derivada de la ley que promulgó su propio equipo de Gobierno en diciembre de 2005. Ya lo dijo el Ejecutivo en 2006, cuando entraba en vigor esta normativa: “Es una ley tolerante”.
El presidente del Gobierno fuma LM Light a bordo del Falcon y, con él, sus asesores y acompañantes.
Madrid.- El Falcon del presidente del Gobierno huele a LM Light, la marca de los pitillos que Rodríguez Zapatero enciende en su interior, ajeno a la prohibición de fumar en espacios públicos cerrados, derivada de la ley que promulgó su propio equipo de Gobierno en diciembre de 2005. Ya lo dijo el Ejecutivo en 2006, cuando entraba en vigor esta normativa: “Es una ley tolerante”.
Desde entonces, a José Luis Rodríguez Zapatero le han pillado fumando en La Moncloa y en ese mismo avión militar, puesto al servicio de sus desplazamientos. Lo han contado los medios de comunicación y hasta ha aparecido en algún libro. Pero el presidente del Gobierno persiste en su aparente ignorancia de la legislación vigente. Se ha podido saber que Zapatero continúa fumando en el avión y, quienes viajan con él, y quieren, también pueden hacerlo, con el pesar del resto de acompañantes que se ven convertidos a la fuerza en fumadores pasivos de los humos del presidente.
Unos y otros confirman que el presidente fuma, aunque “no se le ve demasiado” debido al sitio que ocupa en la cabina de pasajeros: se sienta en la primera fila, dando la espalda al resto del avión y al equipo que viaja con él y que se ubica en la cola del avión. Las mismas fuentes confirman que en el Falcon encienden sus pitillos el jefe de Seguridad, el jefe de Protocolo… y, “uno tras otro”, Angélica Rubio, la periodista asesora de Rodríguez Zapatero, conocida desde que se vio envuelta en la trama Gürtel, al haber trabajado para un constructor leonés implicado en ella, y por el que supuestamente medió ante el presidente del Gobierno.
Puestos a fumar sobrevolando espacio aéreo, también lo hace José Antonio Alonso, ex ministro de Defensa y portavoz del PSOE en el Congreso, “fumador empedernido”. Y se encienden pitillos en el avión militar que utiliza Rubalcaba, donde todos echan humo menos el ministro del Interior.
Elige libertad
En opinión de la titular de Sanidad, Trinidad Jiménez, el problema de la actual normativa, y que trata de paliar la nueva, es que se fume en “espacios públicos cerrados”. El eslogan que la ministra plantea que figure en las cajetillas de tabaco reza: “Elige libertad, nosotros te ayudaremos. Ayuda para dejar de fumar”. La idea forma parte de este borrador de real decreto que prepara el Gobierno y que entrará en vigor en el primer semestre de este año.
La legislación prohibirá fumar en bares y restaurantes, en cualquier espacio público cerrado y en locales de ocio, una norma que impera ya en muchos países de la Unión Europea y que coincide con el inicio de la Presidencia española de la UE. “El objetivo es que se deje de fumar en los espacios públicos cerrados”, sostiene Jiménez.
No quiere debates
La ministra de Sanidad se ha cerrado en banda y piensa sacarla a adelante contra viento y marea. A la espera del reinicio de la actividad parlamentaria, Trinidad Jiménez confía en que su medida estrella para 2010 acabará por imponerse.
Jiménez afirma que con la “ley que aprobamos en 2005 se ha ido generando una cultura social en la que predomina que la gente acepte con normalidad que en los espacios cerrados no se debe fumar”.
Además, sostiene que la ley de 2005 “no obligaba al empresario”. Como resultado de su aplicación, el sector de la restauración prevé unas pérdidas de 1.200 millones de euros, a razón de unos 30.000 euros por local.
Representantes de este sector afirman que los bares verán reducidas sus ventas un 10%, e insisten en que para una parte de su clientela, el 45%, el consumo de productos hosteleros está vinculado al consumo de tabaco.
A estos argumentos, se unen los gastos asumidos por reformar sus locales, adecuándolos a las zonas de fumadores, conforme a la legislación aún en vigor.
Trinidad Jiménez ha asegurado que no habrá indemnizaciones para los que, en su día, hicieron reformas. Manifiesta que menos del 1% de los locales habilitó zonas especiales para fumar.
"La reforma se hizo en su momento. Cuatro años más tarde no se puede hacer ningún tipo de planteamiento, como se me ha hecho, de indemnización", explica.
Jiménez dice que “no es serio” que se haga este planteamiento económico, y que es “absolutamente irrelevante” frente a una cuestión de salud pública.
Por su parte, el Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo ha propuesto al Ejecutivo la desaparición de las máquinas expendedoras de tabaco de los espacios públicos en 2012.
Este colectivo ha alertado de que la ampliación de los puntos de venta de cigarrillos se traduce en una mayor accesibilidad para los menores. "Estos productos deberían venderse sólo en los estancos, suficientes en cantidad para abastecer a los "menos de diez millones de fumadores en España", sentencia.
En las cuentas del Gobierno, y pese a las últimas prohibiciones en camino, hay que considerar que el Estado recaudó, en 2008, 9.266 millones de euros a través de impuestos especiales e IVA relacionados con el tabaco, lo que representa un récord histórico por este concepto. La ministra de Sanidad insiste: “Cada uno es muy libre de fumar”.
Todo esto de que Zapatero se fume un cigarro en el avión está muy bien pero ocuparos de lo importante. Por ejemplo esto:
ResponderEliminarhttp://www.cadenaser.com/espana/articulo/cospedal-juez-acusar-gobierno-espiar-ilegalmente-oposicion/csrcsrpor/20100107csrcsrnac_5/Tes
es lo que suelen hacer prohibir, prohibir y prohibir, el ciudadano cada vez mas metido en cintura.
ResponderEliminarPERO MORALEJA, PARA ELLOS NO ESTA HECHA LA LEY SE LA SALTAN A SUS ANCHAS
son una panda de ..........