Un millón y subiendo.

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Andalucía: un millón de parados
JUAN JOSÉ PRIMO JURADO Domingo , 31-01-10
Los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) nos dicen que de los cuatro millones de personas que forman la población activa andaluza, un millón treinta y nueve mil están en el paro. Es decir, una tasa de desempleo del 25 por ciento. De esa dolorosa cifra de parados, 97.300 son cordobeses. Y no se incluyen aquéllos que están ocupados realizando cursos de formación. Un drama como nunca se había visto.Los analistas estiman que a lo largo del año 2010 se puede llegar al 30 por ciento de paro en Andalucía. Esa cifra podría generar incluso revueltas sociales, pero la economía sumergida evitará que estallen esos conflictos generados por carestía y necesidades de amplios sectores de la sociedad. Lo cual no resta motivos de preocupación: la clave del Estado del Bienestar es que haya suficiente población activa que con sus cotizaciones garantice prestaciones sociales (educación, sanidad, pensiones, etc.) al resto. Y la economía sumergida no cotiza.Existen otros datos preocupantes en Andalucía. Por ejemplo, que el PIB andaluz sea de casi menos uno por ciento; que durante 2010 todas las actividades económicas caerán en las provincias andaluzas; que Andalucía haya perdido el 50 por ciento de su industria, de tal manera que este sector representa ya solo el 11 por ciento del PIB andaluz; que el sector inmobiliario aporta la mitad de desempleados; y que el sector público sigue sin ahorrar y acumulando pérdidas: en 2007 perdió 1.200 millones de euros y en 2009 se le dotó con 3.000.
Los analistas económicos señalan, en general, que la inflexión en esta crisis llegará en 2010 y en 2011 comenzará a recuperarse empleo. De hecho, Navarra y La Rioja están comenzando a salir de la recesión. La recuperación en España no se deberá, exclusivamente, a la acción gubernamental, sino a los propios mecanismos de ajuste del sistema económico y a la recuperación de la credibilidad en empresarios y consumidores.Sin duda, esa recuperación llegará a unos lugares antes que a otros según las medidas que desde la Administración se tomen. En Andalucía, donde durante tantos años el Gobierno socialista ha ejercido de sustituto de la economía en vez de impulsor de ella, el Ejecutivo echa balones fuera, invocando desde la coyuntura global a razones peregrinas para el aumento de las listas del paro. Existe otra ruta posible para acelerar la recuperación y sacar de una vez por todas a nuestra tierra del último puesto:
Bajar los impuestos. Somos la región donde más impuestos se pagan y esto sustrae recursos a las familias y a las pequeñas y medianas empresas, que por cierto representan el 78 por ciento del trabajo privado.