Alguien se tendrá que poner las pilas.

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miércoles 28 de marzo de 2012

Casi cincuenta millones de las antiguas pesetas de dinero público enterrados bajo tierra y el problema sin solucionar.

En el Boletín Oficial de la Provincia número 171 de 27 de Julio de 2010, se publicaba  la subvención adjudicada a la Diputación Provincial de Jaén, por parte de la Dirección General de Cooperación Local del Ministerio de Política Territorial, de 9.997.071,30 euros, de los cuales 4.440.081,82 euros iban destinados a atender la cofinanciación de los proyectos de obras municipales, conforme a las ayudas presentadas por los Ayuntamientos en la Subdelegación del Gobierno de Jaén. El Ayuntamiento de Marmolejo, dirigido entonces por el señor Relaño, acogiéndose a dicha subvención, presentó varios proyectos de obras para su financiación con cargo a estos fondos, uno de los cuales era el de la “Restitución y puesta en estado de uso del colector general de evacuación de aguas residuales de la Pedanía de San Julián”, por un importe de 287.176,25 euros, de los cuales124.713,96 euros irían con cargo a la citada subvención Estatal.

No vamos a entrar en consideraciones técnicas, ni a debatir si la dotación presupuestaria no fue la suficiente para acometer la obra en su totalidad, ya que se mantuvo un tramo final del antiguo colector, o es que analizado este último tramo se estimó que su estado de conservación era adecuado para mantenerlo operativo y se decidió excluirlo del proyecto. Sea como fuere, el hecho es que el proyecto se ejecutó, el dinero se gastó, generó empleo y nos imaginamos que el legítimo margen de beneficio industrial para la empresa adjudicataria, pero lo cierto es, que el flamante colector, no cumple con su objetivo final, es decir, evacuar las aguas residuales del Poblado de San Julián, ¿las causas?, tendrán que dictaminarlas los técnicos competentes. Hasta ahora el año ha venido seco y el escaso caudal que generamos los vecinos va almacenándose a lo largo del colector, en los últimos registros de la obra nueva se detecta como sube el nivel del agua acumulada, si aparecen las deseadas lluvias, algunas viviendas de la zona más baja pueden tener problemas, ya que todo el caudal que recoge el alcantarillado público puede terminar llenando la tubería y salir por sumideros y saneamientos.

                                               

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